Viene de una familia donde el hockey se vive con intensa pasión, juega desde muy chica, pero es dueña del arco en las divisiones inferiores del club YPF Petroleros desde los 9 años de edad. El último fin de semana, en el partido de la Juvenil ante Guaymallén, sufrió un grave desgarro que la mantendrá fuera de las canchas por al menos un mes, sin dudas, una baja muy importante para el club.
Andrea Jara sufrió un desgarro de 3,5cm. en el encuentro de la categoría juvenil, pero para no dejar a su club “en banda”, no solo terminó el partido, sino que también jugó para la Junior, agravando notablemente su lesión.
-¿Cómo fue la lesión?
-Me dio un tirón en el partido de la juvenil, pero yo pensé que no era nada, asique terminé el partido, como no quise dejar a las chicas en banda, también ataje en el Junior. No daba más del dolor, finalmente fue desgarro en el posterior, de 3.5 cm.
-¿Cuál es el tiempo de recuperación que tenés?
-Tengo que estar sin actividad por 30 días, recién ahí empiezo con la rehabilitación y después me dirán cuando puedo volver a jugar.
-Sin dudas una lesión grande, ¿Cómo la llevas a adelante?
-Creo que bien, son cosas que pasan. Me duele mucho el hecho de que vienen partidos muy difíciles para el club y yo no voy a poder estar, pero todo pasa por algo.
Andrea es parte de esta pasión desde prácticamente toda su vida, comparte el club con sus hermanas Laura (19 años) y Natalia (9), quien también se desempeña en la portería azul. Así mismo, sus padres están comprometidos con la institución, trabajando en la Subcomisión de hockey femenino y en la cantina.
Una de las tantas familias que engrandecen un poco más el hockey de las “chicas”. Historias que daremos a conocer más adelante.
El hockey femenino tiene todo para crecer, cuando se dejen de lado las preferencias y se empiece a pensar un poco más en los jugadores y las instituciones que trabajan a pulmón…
Andrea Jara sufrió un desgarro de 3,5cm. en el encuentro de la categoría juvenil, pero para no dejar a su club “en banda”, no solo terminó el partido, sino que también jugó para la Junior, agravando notablemente su lesión.
-¿Cómo fue la lesión?
-Me dio un tirón en el partido de la juvenil, pero yo pensé que no era nada, asique terminé el partido, como no quise dejar a las chicas en banda, también ataje en el Junior. No daba más del dolor, finalmente fue desgarro en el posterior, de 3.5 cm.
-¿Cuál es el tiempo de recuperación que tenés?
-Tengo que estar sin actividad por 30 días, recién ahí empiezo con la rehabilitación y después me dirán cuando puedo volver a jugar.
-Sin dudas una lesión grande, ¿Cómo la llevas a adelante?
-Creo que bien, son cosas que pasan. Me duele mucho el hecho de que vienen partidos muy difíciles para el club y yo no voy a poder estar, pero todo pasa por algo.
Andrea es parte de esta pasión desde prácticamente toda su vida, comparte el club con sus hermanas Laura (19 años) y Natalia (9), quien también se desempeña en la portería azul. Así mismo, sus padres están comprometidos con la institución, trabajando en la Subcomisión de hockey femenino y en la cantina.
Una de las tantas familias que engrandecen un poco más el hockey de las “chicas”. Historias que daremos a conocer más adelante.
El hockey femenino tiene todo para crecer, cuando se dejen de lado las preferencias y se empiece a pensar un poco más en los jugadores y las instituciones que trabajan a pulmón…
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